Quédate con nosotros,
Señor, la tarde está cayendo.
Celebrante:
En el
nombre …
Todos:
amen
Lector:
de los Hechos de los Apóstoles (4,32):
"EL grupo de los creyentes pensaban y sentían lo mismo, y nadie consideraba como propio nada de lo que poseía, sino que tenían en común todas las cosas".
T:
DULCE PADRE NUEStRO SEÑOR Jesucristo,
TE ROGAMOS POR TU INFINITA BONDAD QUE REFORMES AL PUEBLO CRISTIANO SEGÚN
AQUEL ESTADO DE SANTIDAD QUE TUVO EN TIEMPO DE TUS Apóstoles. Escúchanos,
señor porque benigna es tu misericordia.
L.
(Mt.
20,29-34): «Al
salir ellos de Jericó, le siguió mucha gente. Y dos ciegos, que estaban
sentados junto al camino, al oír que Jesús pasaba, gritaron: -¡Señor,
Hijo de David, ten compasión de nosotros"!
La gente les decía que se callaran, pero ellos gritaban todavía más fuerte
diciendo: -¡Señor, Hijo de David, ten compasión de nosotros"!
Jesús se detuvo, los llamó y les preguntó: -¿Qué queréis que haga por
vosotros?
Ellos contestaron: -¡Señor que se abran nuestros ojos!
Jesús, compadecido, tocó sus ojos, y al instante recobraron la vista y le
siguieron.».
T:
¡SEÑOR JESUCRISTO, HIJO DEL DIOS VIVO, TEN PIEDAD DE NOSOTROS¡
(3
veces)
L.
(Gv
14,6): «Yo soy la Via, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre si no es por
mi».
T:
POR EL CAMINO DE LA PAZ, DE LA CARIDAD Y DE LA PROSPERIDAD ME GUÍE Y ME
DEFIENDA EL PODER DE dios padre, LA SABIDURÍA DEL hijo Y LA FUERZA DEL
ESPÍRITU SANTO Y LA GLORIOSA VIRGEN MARÍA. EL ÁNGEL RAFAEL, QUE ESTUVO
SIEMPRE CON TOBÍAS, ESTÉ TAMBIÉN CONMIGO EN TODO LUGAR Y CAMINO.
L. Confiemos en nuestro Señor benignísimo y tengamos verdadera esperanza en Él solo, porque todos los que esperan en Él no serán confundidos para siempre y quedarán estables, fundados sobre la piedra firme y, para obtener esta gracia, acudamos a la Madre de las gracias, diciendo:
T: dios te salve, maría ...
T: Padre Nuestro …
1 L.
(Ez. 11,19-20).«Yo les
daré un corazón fiel y les infundiré un espíritu nuevo; les arrancaré el
corazón de piedra y les daré un corazón de carne».
2 L. Pidamos también a la Virgen que se digne interceder ante su querido Hijo por todos nosotros, par que nos conceda la gracia de ser humildes y mansos de corazón, de amar a su divina Majestad sobre toda otra cosa y a nuestro prójimo como a nosotros mismos y para que estirpe nuestros vicios, nos aumente las virtudes y nos conceda su santa paz.
T:
Dios te salve Maria ....
C.
Y ahora, como
hijos del Dios de la paz, intercambiémonos un gesto de comunión
fraterna.
Todos
se dan la paz
8.
Oremos por la Iglesia
L. Oremos a Dios por su Iglesia, para se digne reformarla según el estado de santidad de los primeros tiempos, y para que ponga paz y concordia entre los cristianos y entre todos los hombres.
L. Oremos a Dios por toda la familia Somasca, por las comunidades y las obras en favor de los pequeños y de los pobres dispersas en todo el mundo, por los religiosos y religiosas, los laicos y laicas que siguen el camino de San Jerónimo, por los niños, y jóvenes que encuentran en su servicio cotidiano.
T:
Dios te salve maría ...
L. Oremos por todos aquellos que se encomiendan a nuestras oraciones, por los que rezan a Dios por nosotros y por aquellos por los que tenemos obligación de rezar, por nuestros amigos y enemigos y por todos los fieles difuntos.
Siguen
algunas invocaciones. Respondamos:
ESCÚCHANOS, SEÑOR
11.
"estar con Cristo"
2L
«En cuanto a
mi ausencia, debéis de saber que yo no os abandono nunca, valiéndome de esas
oracioncillas que yo sé; y aunque no esté con vosotros en el campo de
batalla, oigo perfectamente el griterío y alzo mis brazos en oración
todo lo que puedo. Aunque bien es verdad que yo no soy nada. Tened por seguro
que mi ausencia es necesaria. Las razones son muchas, pero si la Compañía
estará con Cristo se alcanzará el objetivo; de no ser así no ser así
todo
se perderá. La cosa es discutible, pero la conclusión es ésta. Así pues rogad
a Cristo peregrino diciéndole: ¡Quédate con nosotros, Señor, pues se hace
tarde!»
(1ª Let
4-5).
Homilía
del celebrante
Canto
C.
El Señor os bendiga y proteja.
C.
Resplandezca su mirada sobre
vosotros y os otorgue su misericordia.
T:
amen
C.
Dirija su mirada hacia nosotros y
os otorgue su paz
C.
Y la bendición de Dios
todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre vosotros y
permanezca para siempre.
T:
amen
C.
Podéis in paz: llevad a todos la
alegría del Cristo resucitado.
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